El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas convocó una
reunión de emergencia, a pedido de Irán, en respuesta a los ataques
estadounidenses contra sus instalaciones nucleares. Este encuentro, el tercero
de su tipo desde el inicio del conflicto entre Israel e Irán, subraya la
creciente alarma en la comunidad internacional.
Desde Teherán, el Ministerio de Asuntos Exteriores instó al
Consejo de Seguridad de la ONU y al Organismo Internacional de Energía Atómica
(OIEA) a "adoptar medidas urgentes y decisivas en respuesta a esta
terrible violación del derecho internacional". El comunicado iraní fue
contundente: "El silencio ante una agresión tan flagrante hundiría al
mundo en un nivel de peligro y caos sin precedentes", advirtieron.
La ONU Advierte sobre un "Giro Peligroso"
El secretario general de las Naciones Unidas, Antonio
Guterres, expresó su profunda preocupación ante la escalada, alertando sobre
"otro ciclo de destrucción" y represalias, lo que calificó como un
"giro peligroso" en la región. Durante la reunión de emergencia del
Consejo de Seguridad, Guterres manifestó: "He condenado repetidamente
cualquier escalada militar en Oriente Medio". Y añadió: "La gente de
la región no puede soportar otro ciclo de destrucción. Y, sin embargo, ahora
corremos el riesgo de caer en un círculo de represalia tras represalia".
Grossi pide "Máxima Moderación" ante el riesgo nuclear
El director del Organismo Internacional de Energía Atómica
(OIEA), el argentino Rafael Grossi, también se sumó a la preocupación
generalizada, advirtiendo sobre el riesgo de "expansión del
conflicto" y solicitando "la máxima moderación" a las partes
involucradas.
En una intervención por videoconferencia ante el Consejo,
Grossi enfatizó la urgencia de la situación: "Tenemos una ventana de
oportunidad para volver al diálogo y a la diplomacia. Si esa ventana se cierra,
la violencia y la destrucción podrían alcanzar niveles impensables y el régimen
de no proliferación nuclear tal como lo conocemos podría desmoronarse y
colapsar".
Respecto al impacto de los ataques estadounidenses, Grossi
señaló la presencia de "cráteres visibles en el sitio de Fordo, principal
lugar de enriquecimiento de uranio al 60% en Irán, lo que indica el uso por
parte de Estados Unidos de municiones perforantes". Sin embargo, aclaró
que "en este momento, nadie, incluido el OIEA, está en posición de evaluar
los daños subterráneos" en ese sitio. Reiterando una postura central de la
agencia, el director del OIEA insistió en que "los ataques armados contra
instalaciones nucleares nunca deberían tener lugar", y reiteró su
preocupación por los riesgos de emisiones radiactivas.