Un nuevo y escalofriante
incidente aéreo sacudió la ciudad de Nueva York cuando un helicóptero se
precipitó a las aguas del río Hudson, cobrándose la vida de las seis personas
que viajaban a bordo. El siniestro, ocurrido este jueves por la tarde, ha puesto
nuevamente bajo la lupa la seguridad aérea en Estados Unidos.
Imágenes que rápidamente
se viralizaron en redes sociales muestran el dramático instante en que el
helicóptero, un modelo Bell 206, aparentemente se desintegra en el aire antes
de impactar contra la superficie del agua. Testigos presenciales también registraron
escenas posteriores al impacto, donde se podía observar el fuselaje de la
aeronave invertido y parcialmente sumergido en el río, rodeado por varias
embarcaciones de rescate.
El Departamento de
Bomberos de Nueva York recibió la alerta inicial a las 15:17, hora local, y los
equipos de emergencia se movilizaron con celeridad hacia el lugar del
accidente, ubicado cerca de un muelle de mantenimiento adyacente a una torre de
ventilación del túnel Holland, en la costa de Nueva Jersey. Sin embargo, a
pesar de la rápida respuesta, una fuente policial confirmó a la agencia de
noticias AP que ninguna de las seis personas que se encontraban a bordo del
helicóptero logró sobrevivir.
Aunque las condiciones
climáticas presentaban un cielo nublado, la visibilidad no se considera un
factor determinante en el accidente. No obstante, las bajas temperaturas del
agua, cercanas a los 7 grados Celsius, representaron un desafío adicional para las
operaciones de rescate.
Bruce Wall, un testigo ocular del suceso, relató a la agencia AP el horroroso momento en que presenció la desintegración de la aeronave en el aire. "La cola y el rotor se desprendieron. El propulsor seguía girando, pero ya no estaba conectado al cuerpo de la nave", detalló Wall, describiendo la impactante escena.
La Administración Federal
de Aviación de EEUU (FAA) y la Junta Nacional de Seguridad en el Transporte
(NTSB) han anunciado el inicio de una exhaustiva investigación para determinar
las causas de este trágico accidente que enluta a la ciudad de Nueva York y
reabre el debate sobre la seguridad de las operaciones aéreas.