Durante los primeros cinco meses de 2025, la importación de
prendas de vestir en Argentina experimentó un crecimiento sin precedentes,
alcanzando casi USD 253 millones y superando los 73 millones de kilos. Estas
cifras representan un aumento del 77% en valor y 186% en volumen respecto al
mismo período del año anterior, reconfigurando significativamente la oferta de
indumentaria en el mercado local.
Un informe de la Cámara Industrial Argentina de la
Indumentaria detalla las 20 prendas que más ingresaron al país, mostrando un
cambio en el consumo masivo y especializado. Los abrigos se posicionaron como
la prenda con mayor peso en la estructura de importaciones, representando el
26% del total en dólares y concentrando más de 5,7 millones de kilos. Su
crecimiento interanual fue del 60% en valor y 81% en volumen, superando al
resto de los artículos.
En segundo lugar, los pantalones consolidaron un 18% tanto
en dólares como en kilos, con un incremento del 100% en valor y 151% en
volumen. Los sweaters igualaron el peso económico de los pantalones (18%) y los
superaron en volumen (6,5 millones de kilos), registrando un aumento del 111%
en dólares y 156% en volumen. Esta tendencia marca un giro hacia prendas de
abrigo livianas y versátiles.
Las t-shirts o remeras también se destacaron, acumulando poco más del 9% en dólares y ubicándose cuartas en volumen, con más de 4,7 millones de kilos. Su crecimiento respecto al año anterior fue del 88% en dólares y 237% en cantidad, convirtiéndolas en un producto de reposición constante para el sector minorista.
El informe también resalta el notable incremento de rubros
como guantes, que superaron los 6,8 millones de dólares y 10 millones de kilos,
con un aumento del 37% en valor y 85% en volumen. Este crecimiento se atribuye
a la incorporación de prendas técnicas y de protección. La indumentaria
interior femenina se destacó por un salto extraordinario del 1.226% en kilos,
señalando un cambio en el consumo y la participación de proveedores
internacionales.
Otras categorías con avances significativos incluyen
chaquetas (duplicaron su ingreso), conjuntos deportivos (crecimiento del 122%
en valor y 159% en volumen), y calzas y medias (aumento del 155% en dólares y
257% en volumen), en línea con los hábitos de vida saludable y el auge del
entrenamiento. La indumentaria interior masculina también mostró valores en
alza, con un incremento del 90% en facturación y 96% en volumen.
Las cifras demuestran una renovación en la composición y
dinámica de la canasta importada. Si bien abrigos, pantalones, sweaters y
remeras mantienen el liderazgo, la fuerte irrupción de accesorios, prendas
deportivas y artículos para bebés está reconfigurando el mapa de abastecimiento
en la industria nacional y los puntos de venta de moda y básicos textiles. Este
crecimiento heterogéneo se traduce en una mayor variedad y disponibilidad para
el consumidor argentino.