El Gobierno nacional continua transitando una jornada de
alta tensión este miércoles, con una multitudinaria movilización en Plaza de
Mayo en apoyo a Cristina Kirchner. Si bien la exmandataria comenzará a cumplir
su pena en su residencia de Constitución, la convocatoria a Plaza de Mayo a las
14 horas se mantiene, con una vasta presencia de organizaciones peronistas y
kirchneristas.
Altos funcionarios del Poder Ejecutivo estiman que será una
de las movilizaciones más grandes de los últimos años, con cientos de miles de
personas esperadas en las inmediaciones de la Casa Rosada. Desde primera hora
de la mañana, se observa una fuerte presencia de efectivos de la Policía
Federal Argentina y Gendarmería Nacional en la zona, y las inmediaciones de la
Casa Rosada ya han sido valladas parcialmente. En el centro de la Plaza de
Mayo, se está montando un escenario para los oradores del acto.
El presidente Javier Milei seguirá el desarrollo de la
jornada desde la Residencia Presidencial de Olivos, continuando con su agenda
de trabajo. En Casa Rosada, la única actividad pública prevista es una
conferencia de prensa del vocero presidencial Manuel Adorni a las 11 horas.
La ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich,
monitoreará el operativo desde sus oficinas en Gelly y Obes, priorizando
minimizar traslados. Conscientes de la magnitud de la marcha y del contexto de
tensión, en el Gobierno se reconoce la solicitud de los principales
organizadores, Máximo Kirchner y Mayra Mendoza, de que los traslados sean
pacíficos. Sin embargo, no se descartan focos aislados de violencia dada la
alta concurrencia.
En la mesa chica de Bullrich, se enfatizó una "actitud
de prevención en lugares establecidos como Comodoro Py, el Congreso, la Casa
Rosada", así como un monitoreo en rutas nacionales y accesos a la Capital
Federal para evitar cortes.
Al inicio de la jornada, efectivos de la PFA fueron vistos
monitoreando micros con militantes, en un contexto de la reciente reforma que
enfoca a la Policía Federal en investigación de delitos complejos y seguridad
de Estado. La Cámpora ya expresó su rechazo a estas requisas: "Las
intimidaciones nos importan un carajo. Hoy como siempre vamos a estar ahí, en
la Plaza de Mayo, bancando a Cristina".
La coordinación de la seguridad se establecerá en un
comando unificado en el Ministerio de Seguridad de la Nación, donde el
Ministerio de Seguridad de la Ciudad, a cargo de Horacio Giménez, enviará
representantes. Giménez monitoreará desde La Boca y se trasladará a Gelly y
Obes para coordinar directamente con Bullrich. Los dos primeros anillos de
seguridad en Plaza de Mayo dependerán de directivas nacionales, mientras que el
tercero estará a cargo de la seguridad porteña, que también custodiará columnas
provenientes de distintos puntos de la ciudad.
Esta movilización se distingue de otras recientes, como la
marcha universitaria de abril del año pasado, ya que su disparador es el apoyo
público a la expresidenta, reforzando la idea de una persecución política en su
contra.