Un violento tiroteo en The Owl Bar, ubicado en la localidad
rural de Anaconda, Montana, terminó con la vida de cuatro personas anoche. El
presunto autor, Michael Paul Brown, de 45 años, permanece prófugo y es
considerado extremadamente peligroso por las autoridades locales.
Las fuerzas policiales del condado Anaconda-Deer Lodge
lanzaron un operativo de búsqueda con tecnología avanzada para dar con Brown,
quien fue visto por última vez conduciendo una camioneta Ford F-150 blanca
modelo 2007. Las autoridades pidieron a la población evitar la zona y
mantenerse en sus hogares hasta que se capture al sospechoso.
El gobernador de Montana, Greg Gianforte, y el congresista
Ryan Zinke instaron a la comunidad a tomar precauciones y colaborar con la
investigación. Mientras tanto, Anaconda, una ciudad de menos de 10.000
habitantes, permanece en estado de alerta con comercios cerrados y residentes
confinados.
La División de Investigación Criminal de Montana continúa
con las pesquisas para esclarecer las causas del ataque y la relación del
sospechoso con las víctimas, aunque por ahora no se ha revelado un móvil. La
incertidumbre crece en esta tranquila comunidad rural, que nunca había vivido
una situación similar.
Vecinos y comerciantes expresaron su preocupación y
nerviosismo ante la situación inédita. La dueña de un café local contó que,
aunque están acostumbrados a la presencia de armas, el confinamiento por el
tiroteo generó un clima de tensión y alarma.
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