La tensión en Medio Oriente se intensifica con una clara amenaza por parte de los rebeldes hutíes de Yemen, respaldados por Irán. El portavoz militar del grupo, Yahya Saree, afirmó este sábado que atacarán buques estadounidenses en el Mar Rojo si Washington se involucra en la campaña militar de Israel contra Irán.

"Si Estados Unidos participa en un ataque y agresión contra Irán junto con el enemigo israelí, las fuerzas armadas hutíes atacarán sus barcos y buques de guerra en el Mar Rojo", declaró Saree. Esta advertencia llega en un momento crítico, con la Casa Blanca analizando la posibilidad de unirse a los bombardeos contra objetivos del régimen persa para detener su programa nuclear.

La semana pasada, el Ejército israelí confirmó haber atacado al jefe militar de los rebeldes hutíes, Mohamed al Ghamari, aunque aún sin una evaluación de daños. Este bombardeo se produjo mientras las fuerzas israelíes repelían una nueva ofensiva desde Irán y, simultáneamente, atacaban objetivos militares e infraestructuras energéticas en la República Islámica.

Israel profundiza ataques nucleares en Irán

En otra escalada significativa, la aviación israelí realizó un bombardeo "a gran escala" la noche del viernes al sábado contra la planta nuclear de Isfahán en Irán. El portavoz del Ejército de Israel, Effie Defrin, confirmó el ataque, afirmando que buscaba "profundizar" los daños ya causados a la instalación. "Ya habíamos atacado el emplazamiento en el ataque inicial de la operación (13 de junio) y anoche volvimos a atacarlo en un bombardeo a gran escala para reforzar nuestros logros", dijo Defrin.

Isfahán, junto a Natanz, son las plantas nucleares que han sufrido múltiples ataques aéreos israelíes durante la semana de escalada. Israel justifica sus acciones argumentando que los avances del programa nuclear iraní y la manufactura de misiles balísticos representan una amenaza para su seguridad.

La prensa iraní ya ha reportado los ataques contra la planta nuclear de Isfahán, aunque las autoridades nacionales aseguraron que los bombardeos "no provocaron la fuga de materiales peligrosos". Isfahán, en el centro de Irán, alberga el Centro de Tecnología Nuclear y una instalación de conversión de uranio, que según el Ejército israelí, sufrieron "importantes daños". Los ataques también causaron la muerte de dos personas en un edificio residencial en Qom.

Israel comenzó a bombardear Irán en la madrugada del viernes de la semana pasada, apuntando a los avances nucleares y la amenaza de misiles balísticos. Desde entonces, su aviación ha atacado infraestructuras militares (sistemas de defensa aérea, almacenes de misiles balísticos) y plantas nucleares (Natanz, Isfahán), además de altos cargos de la Guardia Revolucionaria iraní y científicos nucleares.