El Gobierno nacional ha anunciado la eliminación del Fondo Fiduciario para el Subsidio a los Consumos Residenciales de Gas Natural, como parte de una profunda reestructuración del esquema de subsidios energéticos. La medida busca un sistema más directo y progresivo, donde los fondos provengan del Tesoro Nacional y se dirijan directamente a los beneficiarios, basándose en los ingresos de cada hogar.

La Casa Rosada apunta a establecer un modelo subsidiario que ya no financie el costo del gas mediante transferencias a las distribuidoras, sino que aplique el beneficio de forma directa a los usuarios. "La idea es que se haga de forma ordenada y que permita determinar quién necesita el subsidio y quién no", expresaron fuentes del Gobierno, destacando la intención de una gestión más eficiente y focalizada de los recursos.

El fideicomiso que se busca eliminar fue creado en 2002 por la Ley 25.565, con el objetivo principal de financiar compensaciones tarifarias para las distribuidoras de gas natural y gas licuado de petróleo, así como para la venta de cilindros y garrafas en regiones como la Patagonia y la Puna. En 2021, su alcance se amplió para incluir a usuarios vulnerables de otras zonas del país. Este fondo se sustenta actualmente con un recargo que se cobra a los usuarios de gas natural, el cual este año aumentó del 5,44% al 6,2%, con posibilidad de llegar al 7,5% sobre el precio del producto en el Punto de Ingreso al Sistema de Transporte (PIST). En 2024, el fondo registró ingresos por $322.210 millones y gastos por $377.021 millones en transferencias al sector privado.

Recortes y reestructuración de beneficios

El Gobierno ya ha implementado recortes en los subsidios energéticos. Más de 130.000 usuarios del régimen de Zona Fría vieron reducido su beneficio del 50% al 30% en la factura de gas, luego de que se detectara que contaban con dos o más medidores registrados bajo este esquema. Además, se eliminaron los beneficios a 15.500 usuarios de Puerto Madero y barrios cerrados, y se planea extender esta medida de exclusión de subsidios a todas las zonas de altos ingresos del país, buscando coordinar el proceso con las provincias.

A pesar de que el fondo fiduciario que subsidia el gas fue el único que el Gobierno no fijó eliminar en el escrito técnico del acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) por US$20.000 millones, el oficialismo argumenta que "el subsidio se va a mantener" y que "lo que cambia en principio es que los fondos van a salir del Tesoro".

La secretaria de Energía, María Tettamanti, prorrogó hasta el 9 de julio de 2026 el decreto 465 de 2024, que habilitó la reestructuración de los regímenes de subsidios de energía. El objetivo es "asegurar una transición que permita trasladar a los usuarios los costos reales de la energía, promover la eficiencia energética y asegurar a los usuarios residenciales vulnerables el acceso al consumo indispensable de energía".