El presidente Javier Milei participó, anoche en La Paz, de la asunción del nuevo mandatario de Bolivia, Rodrigo Paz Pereira, en una ceremonia que marcó el inicio de un nuevo ciclo político en el país vecino. Tras el acto, ambos líderes mantuvieron un encuentro breve pero distendido, en el que Milei expresó su empatía con el flamante presidente.

“Sé lo que estás recibiendo, lo digo por experiencia propia”, le comentó el mandatario argentino con una sonrisa, en clara alusión a la herencia económica que recibió al asumir el poder tras la gestión de Alberto Fernández. Paz Pereira, agradecido, replicó: “Somos buenos para recibir consejos”.

El diálogo, que duró poco más de tres minutos, estuvo cargado de gestos amistosos. Milei se mostró dispuesto a colaborar “en todo lo que podamos ayudar”, mientras Paz Pereira compartió anécdotas personales sobre su vínculo con Argentina y la provincia de Salta, así como su afición por el Club Atlético Independiente.

Durante su discurso inaugural, el nuevo presidente boliviano describió la situación del país como “devastada”, denunciando que recibe una economía “quebrada” y “endeudada moral y materialmente”. Prometió iniciar una etapa de reconstrucción institucional tras casi dos décadas de gobiernos del MAS.

La presencia de Milei fue celebrada por los legisladores bolivianos, que lo ovacionaron y se acercaron a saludarlo. Antes de despedirse, Paz Pereira le obsequió una piedra violeta conocida como “Bolivianita”, símbolo de decisión y energía, que el mandatario argentino agradeció con humor: “Me encanta, es el color nuestro”.

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