San Luis del Palmar volvió a quedar bajo el agua ayer luego de una madrugada marcada por lluvias intensas que acumularon 100 milímetros en apenas unas horas. El nivel del Riachuelo alcanzó los 3,85 metros y sigue creciendo, forzando la evacuación de diez familias y dejando a otras tantas aisladas en la zona rural.

Los barrios Inmaculada, Virgen del Rosario y la franja ribereña son los más afectados. Vecinos relataron que el agua avanzó más de cien metros hacia el centro de la localidad desde la noche del viernes, transformando calles en verdaderos canales. En algunos sectores, el acceso solo es posible en lancha.

“Hay familias que se niegan a salir por temor a robos, aunque el agua ya ingresó a sus casas”, contó el periodista local Luis Dalmacio. Equipos de Obras Públicas y bomberos trabajaron durante toda la jornada para asistir a los hogares más comprometidos.

Además de las viviendas anegadas, al menos tres sufrieron voladuras de techo debido a las fuertes ráfagas de viento que acompañaron el temporal. En tanto, la Cuarta y Sexta Sección Rural permanecen prácticamente incomunicadas por el deterioro de los caminos.

Los evacuados fueron trasladados al Polideportivo Municipal y al centro comunitario Mbayá Soto, donde se organizan las tareas de asistencia con apoyo de voluntarios y del municipio. En una semana, San Luis del Palmar ya acumuló más de 300 milímetros de lluvia y la situación sigue siendo crítica.

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