El caso del triple femicidio narco en Florencio Varela
sigue generando conmoción en todo el país. El primer fiscal de la
investigación, Gastón Duplaá, aseguró que las víctimas sufrieron un
“sufrimiento inhumano” antes de morir, lo que marca la brutalidad con la que
actuaron los asesinos.
Según las pericias forenses, Brenda del Castillo (20),
Morena Verdi (20) y Lara Gutiérrez (15) fueron sometidas a golpes, cortes y
torturas extremas. Los informes detallan que incluso presentaban lesiones
innecesarias para consumar el crimen, lo que confirma el ensañamiento
denunciado por la fiscalía.
El fiscal describió que los homicidas actuaron “a traición
y sobre seguro”, aplicando violencia de género y aprovechando la vulnerabilidad
de las víctimas. El ataque, según los investigadores, estuvo ligado a una trama
narco que utilizó como engaño una supuesta fiesta a cambio de dinero.
Tras el hallazgo de los cuerpos en una vivienda de
Florencio Varela, la causa pasó al fiscal de Homicidios de La Matanza, Adrián
Arribas. Hasta el momento hay cuatro detenidos, pero los investigadores buscan
a más sospechosos, entre ellos un jefe narco apodado “Pequeño J” y Matías
Agustín Ozorio, sobre quien ya pesa un pedido de captura internacional.
La sociedad sigue impactada por la crueldad del caso, que
expone la violencia narco en el conurbano bonaerense y abre interrogantes sobre
cómo evitar que más jóvenes caigan en manos de estas redes criminales.
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