Luego de un temporal que dejó un acumulado cercano a los
300 milímetros en poco más de un día, el Servicio Meteorológico Nacional (SMN)
levantó la alerta por tormentas fuertes en Corrientes. La decisión marca el
inicio de una mejora gradual de las condiciones, aunque con inestabilidad
residual, temperaturas elevadas y un impacto aún visible en barrios anegados y
familias evacuadas en la Capital.
Las precipitaciones registradas entre el fin de semana y el
inicio de la semana provocaron una paralización parcial de la ciudad y pusieron
bajo presión al sistema de drenaje urbano. Corrientes atraviesa una etapa de
recuperación mientras continúan los operativos de limpieza y asistencia. El
levantamiento del alerta no implica un retorno inmediato a la normalidad
climática, sino el cierre de la fase más crítica del evento, en un escenario de
suelos saturados y alta humedad ambiental.
En la Capital, las autoridades confirmaron que el volumen
de lluvia acumulado colapsó desagües pluviales y afectó la circulación y el
transporte público. Más de 150 personas continúan evacuadas y son asistidas en
centros habilitados en escuelas públicas, mientras siguen activos los trabajos
de desobstrucción de sumideros para facilitar el escurrimiento ante eventuales
chaparrones. El impacto se concentra en sectores de baja cota, donde la
recuperación depende tanto de las tareas en curso como de la evolución del
clima.
Según el pronóstico oficial, desde la madrugada de hoy aún
existe una probabilidad elevada de lluvias, con una mejora hacia la tarde. Para
Nochebuena se espera un cielo mayormente nublado, baja chance de tormentas
aisladas y temperaturas que podrían alcanzar los 35 grados, condiciones que se
repetirían el día de Navidad. Las autoridades recomiendan mantener precauciones
básicas y colaborar con las tareas preventivas mientras se completa la
normalización del sistema urbano.
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