Corrientes y Misiones se preparan para una significativa
mejora en su infraestructura ferroviaria. Se están ultimando los detalles para
iniciar los trabajos que permitirán a la Línea Urquiza duplicar su capacidad de
carga en los próximos cinco años y restablecer la conexión ferroviaria con
Brasil.
Estos arreglos forman parte del “Proyecto Obras
Prioritarias de Recuperación de Infraestructura” de la Línea Urquiza, un
convenio entre el Ministerio de Relaciones Exteriores y el Fondo para la
Convergencia Estructural del Mercosur (Focem). El objetivo principal es
aumentar la competitividad y la capacidad de transporte, fortaleciendo así la
integración regional al mejorar 210 kilómetros de la traza ferroviaria que
recorre Corrientes, Misiones, Entre Ríos y Buenos Aires. Esta línea es clave,
ya que representa la puerta de ingreso a Brasil, Uruguay y Paraguay.
El esquema de trabajo, con una duración de tres años, prevé
una inversión total de $44.465.546 millones de dólares por parte de Trenes
Argentinos Cargas (TAC). De este monto, $29.800.290 serán aportes no
reembolsables del Focem, mientras que el resto provendrá de fondos propios de
la empresa ferroviaria.
Ya se han iniciado las gestiones para las compras de
insumos, divididas en 20 tramos. Recientemente, se utilizaron fondos para
adquirir fijaciones y trasladar rieles a la base operativa del ferrocarril
Urquiza en Zárate, provincia de Buenos Aires. Además, se lanzó la licitación
para el mejoramiento de vía en varios sectores.
Actualmente, se están evaluando ofertas para adjudicar las
obras que restablecerán la conexión internacional entre Paso de los Libres
(Corrientes) y el Puente Internacional en Brasil, un tramo de cuatro
kilómetros. Los otros segmentos que completan los 210 kilómetros de mejora
incluyen los 140 km entre Basavilbaso y Concordia, que contempla la instalación
de un puente metálico sobre el arroyo Las Canarias, y los 66 kilómetros que
unen la ciudad correntina de Virasoro con el cruce internacional Posadas (Misiones)-Encarnación
(Paraguay).
Según los responsables del proyecto, los beneficios son
múltiples: la mejora en la infraestructura reducirá los costos operativos ante
una mayor demanda, disminuirá la probabilidad de descarrilamientos e
incrementará la velocidad de traslado, lo que optimizará el consumo de
combustible y la eficiencia del material tractor.