Thiago Correa, el niño de siete años que fue baleado en la cabeza el miércoles en Ciudad Evita, falleció anoche tras dos días de agonía. La confirmación la dio su padre, sumido en un profundo dolor. El trágico hecho ocurrió en el cruce de Crovara y Madrid, cuando Thiago esperaba el colectivo junto a su papá y el agente de la Policía Federal Facundo Aguilar Fajardo se enfrentó a tiros con delincuentes.

Uno de los disparos impactó en la cabeza de Thiago, quien fue trasladado de urgencia al Hospital Balestrini, de San Justo. "Quiero informar el fallecimiento de Thiago. Es muy doloroso para todos. Necesito justicia, por favor. Esto se tiene que pagar”, expresó Fabián, el padre, visiblemente conmovido, junto a la madre del pequeño.

El agente Aguilar Fajardo, de 21 años, fue indagado ayer y permanece detenido. Está acusado de haberse excedido en el uso de la fuerza al disparar contra un grupo de delincuentes que acababan de asaltarlo.

El dramático relato del padre y la investigación en curso

Fabián, el papá de Thiago, relató el horroroso momento: “Estaba esperando el colectivo con él. Primero escuché una explosión, pensé que era una moto, y de repente empezaron a tirar cuatro tiros más. Ahí me di cuenta de que se estaban agarrando a tiros. Cuando quiero tirar al piso a mi hijo, ya lo había herido una bala”. Con la voz quebrada, añadió: “Empecé a gritar: ‘¡Ayuda! ¡Por favor!’. Ahí apareció un hombre en un auto, nos levantó y nos llevó al hospital Balestrini. Lo último que me dijo fue: ‘Papá’. Siento que fue una pesadilla”.

En total, se escucharon 11 detonaciones. El fiscal a cargo del caso, Diego Rulli, de la UFI de Homicidios, continúa la investigación. Se analizan las pruebas recolectadas en la escena, las pericias balísticas y las grabaciones de las cámaras de seguridad. Un dato clave que generó sospechas fue la ausencia de vainas servidas en el lugar, lo que sugiere una posible alteración de la escena para entorpecer la investigación. Solo se encontró el cargador del arma. Este intento de ocultamiento de pruebas fue un factor determinante para que el fiscal ordenara la detención del agente.

Thiago asistía a la escuela Santa Rosa, de La Tablada, cuyas autoridades convocaron a una misa en memoria del niño. Ahora, la Justicia deberá determinar si la actuación del policía se encuadró en la legítima defensa o si hubo un uso indebido de la fuerza que derivó en esta lamentable tragedia.