La ganadora del Óscar relató que la idea surgió de una broma durante una sesión de creación de aromas con el perfumista Douglas Little, colaborador habitual de la marca Heretic. "Estábamos jugando con diferentes aromas un día, y olí algo y dije: 'Oh, eso huele como… ya sabes'", compartió la actriz con el público. Lo que inicialmente fue una ocurrencia irreverente entre Paltrow y Little rápidamente se materializó en un producto real. "Yo estaba bromeando, y él (Douglas) dijo: 'Deberíamos hacer una vela con eso y ponerla en el sitio'. Sonaba como una idea ganadora", añadió con sarcasmo.

Para sorpresa de ambos, la vela se convirtió en un fenómeno viral, generando una intensa atención mediática. "De repente, estaba literalmente en el sitio web. Y luego rompimos Internet otra vez. Nos tomó mucho tiempo superar eso", comentó Paltrow entre risas. Sin embargo, más allá de la controversia y los titulares sensacionalistas, la actriz de 52 años explicó que la decisión de mantener el producto a la venta tenía un propósito más profundo relacionado con la sexualidad femenina y la vergüenza impuesta socialmente. "Hay un aspecto de la sexualidad femenina con el que nos han socializado para sentir vergüenza. Me encantó esta idea tipo punk rock: 'Somos hermosas, somos increíbles, y que se jodan todos'", declaró con firmeza, provocando el aplauso de la audiencia.

Aunque la vela original, con notas de geranio, bergamota cítrica, rosa damascena, cedro y semilla de ambreta, ya no se encuentra disponible en el sitio oficial de Goop, su popularidad fue tal que actualmente se revende en línea a precios que alcanzan los 400 dólares. Lejos de detenerse, Paltrow capitalizó el revuelo con lanzamientos igualmente provocativos como "This Smells Like My Orgasm" y "This Smells Like My Prenup". En 2022, dio un giro más político con "Hands Off My Vagina", una vela solidaria creada para conmemorar el aniversario del fallo Roe v. Wade, cuyas ventas destinaron fondos a la ACLU Foundation’s Reproductive Freedom Project. Con estos productos, Gwyneth Paltrow ha desafiado las normas del marketing tradicional, buscando generar conversaciones sobre la autonomía corporal femenina, el placer, el consentimiento y la identidad, considerando la provocación como parte esencial de su mensaje de liberación femenina.

PDJS