Un ciudadano con doble nacionalidad estadounidense y
alemana ha sido acusado de intentar lanzar una bomba incendiaria contra una
oficina de la embajada de Estados Unidos en Tel Aviv la semana pasada, según
informó el Departamento de Justicia.
Las autoridades alegan que Joseph Neumeyer, de 28 años,
escupió a un guardia de seguridad frente a la embajada el 19 de mayo y huyó,
dejando caer una mochila que contenía tres botellas de vidrio, supuestamente
destinadas a ser utilizadas como cócteles molotov.
Amenazas en redes sociales y detención
El Departamento de Justicia reveló que Neumeyer había
publicado ese mismo día en redes sociales: “Únanse a mí mientras quemo la
embajada en Tel Aviv. Muerte a Estados Unidos”. Otras publicaciones atribuidas
a Neumeyer incluían amenazas de asesinato contra el presidente Donald Trump y
el multimillonario Elon Musk. En un post de marzo, Neumeyer declaró
públicamente al Departamento de Justicia: “El expresidente tiene varias horas
para dimitir o una muerte segura”.
Las autoridades israelíes detuvieron a Neumeyer en su hotel
y lo trasladaron en avión al aeropuerto internacional John F. Kennedy de Nueva
York, donde agentes del FBI lo tomaron bajo custodia estadounidense. Según una
denuncia penal, Neumeyer nació en Colorado, vivió en Estados Unidos hasta
principios de este año y llegó a Israel el mes pasado.
Detalles del incidente y cargos
Según la denuncia, Neumeyer caminaba junto a la embajada
cuando escupió a un guardia, quien intentó detenerlo. El guardia logró agarrar
la mochila de Neumeyer, que cayó al suelo cuando este se soltó y echó a correr.
Al oler alcohol, los guardias abrieron la mochila y encontraron las tres
botellas de vidrio, al menos una de ellas con un trapo en el cuello. La policía
israelí, que envió una unidad de artificieros al lugar, compartió una foto del
contenido de la bolsa, que incluía dos botellas de cerveza, una botella de
licor y trapos de tela.
La policía israelí, utilizando cámaras de vigilancia,
rastreó a Neumeyer hasta un hotel a cinco manzanas de la embajada. Allí, el
sospechoso confesó a la policía que había metido en su mochila “botellas de
cóctel molotov” llenas de vodka.
La jueza Peggy Kuo ordenó este fin de semana que Neumeyer
permaneciera detenido. Si es declarado culpable, enfrenta hasta 20 años de
prisión y una multa de 250.000 dólares. La fiscal general Pam Bondi declaró que
Neumeyer fue “acusado de planear un ataque devastador dirigido contra nuestra
embajada en Israel, amenazando de muerte a los estadounidenses y la vida del
presidente Trump”.
El padre de Neumeyer, Zack, mencionó que su hijo ha tenido
“profundos problemas de salud mental”. Es importante destacar que no se han
encontrado indicios de que este incidente esté relacionado con el tiroteo en
Washington que, dos días después, acabó con la vida de dos empleados de la
embajada israelí.
La oficina de Tel Aviv fue el principal puesto de avanzada
de Estados Unidos en Israel para servicios consulares y trabajo diplomático
durante décadas, hasta que la embajada se trasladó a Jerusalén en 2018 durante
el primer mandato de Trump.