En una emotiva homilía durante el funeral del Papa
Francisco en la Plaza de San Pedro, el cardenal Giovanni Battista Re destacó la
incansable labor del Sumo Pontífice en la búsqueda de la paz y su compromiso
con los más vulnerables. “Frente al estallido de tantas guerras en estos años,
con horrores inhumanos e innumerables muertos y destrucciones”, Francisco “no
ha cesado de alzar su voz implorando la paz e invitando a la sensatez, a la
negociación honesta para encontrar posibles soluciones”, expresó el cardenal.
Re, encargado de oficiar las exequias ante una multitud de
fieles y líderes mundiales, citó frases emblemáticas del pontificado de
Francisco, como: “Porque la guerra es sólo muerte de personas, destrucción de
casas, hospitales y escuelas. La guerra siempre deja al mundo peor que antes,
para todos es siempre una derrota dolorosa y trágica”.
El cardenal resaltó que Francisco fue un Papa “entre la
gente”, “con el corazón abierto a todos” y dedicado “a los últimos de la Tierra
y marginados”. “Estableció contacto directo con la gente, deseoso de estar ahí
para todos, con una marcada atención a quienes tenían dificultades, dedicándose
a pensar en todo, hasta en los últimos habitantes de la Tierra y en los
marginados. Fue un papa entre el pueblo, con un corazón abierto a todos”,
añadió Re.
También recordó la famosa frase “Construir puentes y no
muros”, pronunciada en presencia de líderes mundiales, y destacó la última
imagen del Papa, impartiendo su bendición desde el balcón de la Basílica de San
Pedro.
Re elogió el “vocabulario característico y su lenguaje rico
en imágenes y metáforas” de Francisco, así como su “gran espontaneidad y un
modo informal de dirigirse a todos”. Subrayó su visión de una “Iglesia es un
hogar para todos; una casa con puertas que siempre están abiertas” y su
especial atención a refugiados, desplazados y pobres, recordando sus viajes a
Lampedusa, Lesbos y la frontera entre México y Estados Unidos.
El cardenal concluyó su homilía recordando que Francisco
solía pedir oraciones, y ahora, invoca su intercesión: “Querido papa Francisco,
ahora te pedimos que reces por nosotros y que desde el cielo bendigas a la
Iglesia, bendigas a Roma, bendigas al mundo entero”.
P.D.J.S.