Los activos argentinos volvieron a enfrentar una jornada adversa ayer en los mercados internacionales. En una rueda global mayormente positiva, acciones y bonos locales se desacoplaron y registraron marcadas caídas, mientras crecía la incertidumbre por el futuro del financiamiento externo del país.

En Buenos Aires, el S&P Merval retrocedió 3,1% en una sesión parcial por el feriado. En Wall Street, firmas como Edenor, Banco Francés y Grupo Galicia lideraron las bajas, con descensos que superaron el 5%. Los bonos Globales y Bonares acompañaron el deterioro con una pérdida promedio del 0,9%.

El disparador fue una publicación de The Wall Street Journal que indicó una posible reconfiguración del plan de asistencia financiera con bancos internacionales. Aunque el ministro de Economía, Luis Caputo, negó categóricamente que existiera un rescate en negociación, el informe generó volatilidad inmediata y presionó al riesgo país hasta los 651 puntos básicos.

Analistas del mercado señalaron que la sensibilidad de los activos argentinos frente al clima externo se intensificó en los últimos meses. También remarcaron que cualquier alteración en la estrategia de financiamiento —como un eventual REPO o canje de títulos— impacta de forma directa en la percepción de riesgo y en la capacidad del Gobierno para volver a los mercados internacionales.

A pesar del feriado cambiario, los dólares financieros operaron en alza y reavivaron dudas sobre la disponibilidad de divisas de cara a los vencimientos de enero. En paralelo, el Banco Central volvió a reducir encajes para dinamizar el crédito, en un contexto en el que la política económica busca equilibrar liquidez, reservas y expectativas.

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