La profesional explicó que “una persona puede llegar a no dormir si quiere porque las horas de sueño las maneja cada uno, pero la idea es que se necesitan determinada cantidad de horas de sueño”. Agregó que “un sujeto puede durar un día o dos sin dormir, pero cuando pasa a que no podemos dormir por más que queramos y el sueño se acorta, esto puede alterar el estado mental y físico”.

Recalcó que “un adulto normal requiere un promedio de siete horas de sueño”, pero aclaró que “algunos duermen cinco y se sienten bien y otras requieren ocho, pero se promedia en siete”. Por lo tanto, indicó que “una persona con solamente dos horas de sueño por día tiene un déficit demasiado grande”, en referencia a lo que se afirma que sucede con Diego Maradona.  

Expuso que “físicamente, el cuerpo no está en condiciones y tenemos más predisposición a sufrir accidentes porque se modifica el estado de alerta y estamos predispuestos a accidentes domiciliarios, laborales y de tránsito”. En el plano mental, recordó que “la actividad cerebral se deteriora, se afecta la concentración, la memoria y la capacidad de respuesta”.  

Indicó que “sufrimos un déficit de sueño en los últimos 100 años, que dio origen a un montón de enfermedades, pero cuando repercute en la salud recién tomamos conciencia”. “Sabemos que tenemos que priorizar el trabajo, lo social y sacamos horas de sueño para completar lo pendiente”, expresó.