En las redes sociales de China, el tema explotó. En Weibo, algo así como el Facebook del gigante asiático, el hashtag #OldWomanPutsJuiceIntoVeins (mujer vieja se puso jugo en las venas) tuvo más de 11 mil comentarios en apenas unas horas. Es que nadie puede entender cómo es que la mujer, de quien sólo trascendió su apellido -Zeng-, decidió inyectarse una bebida a base de unas 20 frutas directamente en la sangre. La información fue publicada por el sitio de la BBC. 

Obviamente las consecuencias fueron terribles. Su vida corrió serio peligro y debió pasar varios días en terapia intensiva hasta que pudo recuperarse. Entre la comunidad médica crece la preocupación en torno a estas prácticas, ya que se trata de un error que casi le cuesta la vida a la mujer.

Según explicó el medio South China Morning Post, Zeng, de 51 años, residente del condado de Guiyang,sufrió daños en el hígado, los riñones, el corazón y los pulmones y debió ser internada en terapia intensiva durante cinco días.

Al mismo tiempo en el Xiaoxiang Morning Herald, se explicó que la mujer había mostrado previamente interés en tratamientos de salud no convencionales. Pero fue el pasado 22 de febrero cuando tuvo la idea que casi la mata. Decidió inyectarse un jugo de frutas en las venas creyendo que eso podría "beneficiar a su salud".

"Había más de 20 tipos de frutas en la inyección intravenosa", explicó un empleado del Hospital Afiliado de la Universidad de Xiangnan a la BBC.

Al poco tiempo de realizarse la inyección de la mezcla, la mujer empezó a sentir picazón en la piel y la temperatura de su cuerpo comenzó a aumentar.

Ese mismo día fue internada en la unidad de cuidados intensivos del hospital donde pasó 5 días. Su vida llegó a correr serio peligro de morir por una disfunción orgánica múltiple. Los médicos limpiaron su sangre mediante diálisis y le dieron antibióticos. Lentamente, su condición mejoró y, previa revisión de sus riñones, fue dada de alta.

Jianxiu, el médico que la atendió aseguró que Zeng había sufrido una severa infección, que afectó sus riñones, pulmones y corazón. Estuvo a punto de morir a causa de una septicemia, una infección gravey generalizada en la cual los gérmenes se extienden por la sangre y los tejidos del cuerpo. Se salvó y según explicó el especialista, la mujer nunca imaginó todo lo que podría pasarle. "Nunca pensé que me estaba metiendo en un problema tan grave", le habría confesado al doctor.

Los usuarios de redes sociales en China afirman que el caso resalta la necesidad de que se difundan más los conocimientos básicos de medicina.